martes, 12 de junio de 2012

TOOL - "LATERALUS"


TOOL - "LATERALUS"

Estamos ante una obra maestra. Una de esas cosas con las que nos encontramos pocas veces en la vida. No sólo hace falta estar comprometido con la música y con el arte para sacar un disco de este calibre. Ni siquiera es suficiente con estar inspirado, además hay que ser muy bueno. En esta banda se dan una conjunción de músicos cuya técnica supera al de la mayoría de los mortales aunque no llenen sus discos de sólos interminables de guitarra. Tool no es eso, Tool es otra cosa, es una herramienta para adentrarnos en nosotros mismos. Este grupo es como esta portada: oscuro, misterioso, indescifrable, profundo, mental, simbólico. Esto, señores, es mucho más que música, es una experiencia que empieza por los sentidos pero que los sobrepasa hasta adentrarse en lo más profundo de nuestro ser. No estoy exagerando. Esta banda tarda en sacar un disco una media de 6 años, lo cual no quiere decir que se lleven 6 años preparando el siguiente disco pero sí le dedican mucho tiempo a elaborar su próxima obra. Esto no es convencional en ninguno de los sentidos. El valiente que quiera meterse un disco de Tool entre pecho y espalda que sepa que va a gozar como nunca pero que también se va a adentrar en aguas pantanosas, que va a conocer rincones de sí mismo que nunca había visto. Como cualquier cosa, un disco de Tool se puede disfrutar de varias maneras y en distintos niveles, pero casi sin darte cuenta ellos te llevan a lo profundo, te agarran de la mano y te llevan cada vez más hondo, mar adentro, hasta que te das cuenta de donde estás. Y para ello se toman su tiempo, Tool es un grupo que tiene mucha paciencia, rara vez te van a hacer una canción de 3 minutos y medio que sea un típico single para poner en la radio, sus canciones duran normalmente de 6 a 11 minutos y se toman su tiempo, no te muestran la joya de la corona rapidamente, tienes que entrar tú mismo a buscarla.

La fama de este grupo llegó a mis oidos y una amiga me grabó el que hasta hoy es considerado su mejor disco "Aenima". El disco me encantó aunque tardó bastante en entrarme bien por lo poco convencional de su música. Tool no busca estridencias, no busca provocar, no busca ni siquiera romper con todos los moldes o simplemente mostrar su ira o su descontento con la sociedad. Busca hacer filosofía con instrumentos musicales. Después de escuchar y disfrutar muchísimo el "Aenima", allá por el 2005 me baje el siguiente disco (publicado en 2001) llamado "Lateralus" (ni que decir tiene que unos meses después me los compré los dos originales) Al principio me gustó igual que el anterior, quizás no tenía tantos hits pero era un gran disco. Sin embargo, el verdadero valor de este disco se conoce con el tiempo, escucha tras escucha te das cuenta de que es algo a lo que no se le ve el fondo. En su música nada esta hecho al azar, todo está estudiado, todo está milimétricamente calculado.

He leído por ahí que este disco tiene mucho que ver con la secuencia de números de Fibonacci. Esta sucesión comienza por el número 1 y se van añadiendo números cuyo resultado es la suma de los dos anteriores (1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55...) En el Renacimiento esta secuencia representaba la divina proporción de toda la creación ya que se encuentra en configuraciones biológicas de la naturaleza como las ramas en los árboles o en la disposición de las hojas de un tallo. Desde Pitágoras ya se había hablado de la relación de las matemáticas con la música. En la canción número 9 del disco se encuenta una pauta en las sílabas de las estrofas que corresponde a esta secuencia de Fibonacci, lo cual ha hecho que en internet podamos encontrar infinidad de teorías sobre el disco,  pero bueno no vamos a emparanoiarnos demasiado que esto es para disfrutarlo no para volverse loco.

La primera canción "The Grudge" es genial y una increible manera de empezar. El ritmo de batería de Dany Carey (de los mejores bateristas que he escuchado en mi vida) te va envolviendo y envolviendo hasta terminar en un final brutal. Este hombre parece de otro mundo, en cada disco sorprende más que en el anterior. La segunda pista es una introducción tranquila de guitarra hacia "The patient", una canción para mi de transición, bastante buena pero menos inspirada que las demás. Pero bueno lo importante es que cumple su función a la perfección y nos lleva al siguiente paso, nada aquí esta puesto de manera casual como dije antes. La cuarta pista es un mantra que parecen sonidos de ballenas. La quinta es "Schism", una canción verdaderamente buena que fue elegida como single y que tiene un video super extraño. Como en casi todos los videos de la banda los integrantes no aparecen, lo que se muestran son imágenes oníricas con bastante poco sentido como si de un sueño se tratase. El ritmo que utilizan te va metiendo en la canción como si estuvieras caminando sobre ella.  Lo siguiente es lo que llamó mi primera atención sobre este disco "Parabol - Parábola". Esta canción fue elegida también como single. Son dos pistas unidas (una intro y la canción) que duran en total 9 minutos. A pesar de sus imágenes extrañas y su duración fue single y el video fue emitido en MTV para mi fortuna. Fue una de las primeras canciones suyas que conocí,  gracias a ese medio,  y me fascinó, me atrapó desde el primer momento, todavía hoy me parece la mejor canción del disco. Como dije antes Tool se toman su tiempo para atraparte como si fuera una telaraña. La intro de esta canción es absolutamente genial, tranquila, con la voz de Maynard como si estuviera llamando a la oración. Es comparable con la religión lo que hacen estos tipos, tocan la fibra espiritual del ser humano en su música y en sus letras.
La siguiente canción "Ticks and Leeches" es algo más convencional, más directa y donde la voz se desgarra muchísimo. Esta canción tiene un intermedio que es tan largo que si estás oyéndola mientras estás ocupado en otra cosa se te llega a olvidar lo que estabas escuchando, hasta que vuelve con una fuerza fuera de lo común. A partir de aqui las canciones que restan no son tan llamativas en un primer momento, no te vuelan tanto la cabeza como lo hicieron las anteriores pero siguen siendo tremendamente buenas. El ritmo de batería tribal que utiliza en ocasiones Dany Carey es un intrumento genial en la conjunción del grupo y sirve perfectamente a sus intereses de llevarte hacia lo desconocido. La última canción "Triad" es muy metalera y parece una montaña rusa que sube, baja y vuelve a subir para terminar de una manera increible un disco que nunca pasará de moda porque no tiene nada que ver con la moda, esto es arte con mayúsculas.

El sonido y la producción son dos cosas impresionantes en este disco. Es increible como suena cada instrumento y como suena la voz (en la produción mejora bastante a su predecesor, que ya es decir muchísimo). Es compacto, potente y tiene una personalidad arrolladora. De hecho su guitarrista, Adam Jones, participa mucho en las producciones. Parece mentira que él sea el único guitarrista del grupo por la profundidad y la calidad que tienen todas las guitarras. Además se encarga del arte gráfico del disco, que es espectacular. Todos y cada uno de los integrantes son muy muy buenos en lo suyo pero además se integran perfectamente dando lugar a una maravilla que no deja de sorprenderte con el paso de los años. Este grupo y este disco me han acompañado y me acompañarán siempre porque ya forman parte de mí mismo.

La música también es entretenimento, yo no soy de los que cree que toda la música que entretenga es basura comercial. De hecho la música en su mayoría no tiene ni tendría que tener nada que ver con la metafísica, la filosofía o con otras cosas tan profundas. Pero es una suerte tener a Tool porque nos ofrecen maravillas cada cierto número de años, maravillas que se quedan ya para la posteridad. Una de esas mayores maravillas es este disco que acabo de comentar. Su último disco salió a la luz en el 2006 por lo que pronto (en este año o el siguiente) publicarán nuevo album. Estaremos a la espera de su nueva obra maestra, estos tios hasta ahora no han defraudado nunca.

lunes, 4 de junio de 2012

EXTREMODURO - "YO, MINORÍA ABSOLUTA"



EXTREMODURO - "YO, MINORÍA ABSOLUTA"

¿Nunca habéis escuchado eso de "te sienta peor que a un Cristo dos pistolas"? Pues aquí lo teneis. Seguramente la portada más polémica de Extremoduro para uno de sus mejores discos. Allá por el año 2002 Roberto Iniesta (el cantante, el de la portada, el único Iniesta famoso en esa época) sacó este disco con su banda, Extremoduro, una de las mejores del rock español. Los comienzos de la banda fueron dificiles y aunque sacaban discos muy buenos el nivel de profesionalidad no lo era tanto y el sonido de las grabaciones dejaba mucho que desear. Sin embargo se podía ver claramente que la calidad de las canciones y de las letras era muy alta y que tarde o temprano este grupo tenía que subir un escalón en su sonido para llegar a los oidos de los que todavía no lo habían escuchado. Ese salto se dió en 1996 con su albúm "Agila" para muchos el mejor de la banda, y puede que tengan razón. Pero yo he elegido este entre los diez discos que han marcado mi vida porque lo vi nacer y crecer entre mis oidos.

Unos 4 años antes de que saliera este disco, uno de mis dos mejores amigos me grabó una cinta de cassete con todos los exitos de Extremoduro y posteriormente me grabó el "Agila". A mi me gustó bastante a pesar de que muchas canciones tenían un deficit importante en cuanto al sonido pero la calidad, la crudeza y la magia que desprende este grupo siempre estuvo ahí. Posteriormente me grabé su disco en directo "Iros todos a tomar por culo", curiosamente fue el primer disco que grabe con una grabadora de CD. Era la primera vez que yo tenía esa máquina invento del diablo que convertía en empresario al chaval del instituto que tenía la fortuna de tenerla. Corría el año 99 y ya había más gente que la tenía, yo nunca hice un negocio con eso pero recuerdo que uno o dos años antes tener una grabadora de CD era como tener la gallina de los huevos de oro.

Después de ese disco en directo sacaron un disco que, aunque sonaba mejor, dejaba mucho que desear. La introducción de Iñaki "Uoho" Antón en la banda desde 1996 ´había mejorado muchísimo el sonido y la calidad de las guitarras. Pero ese disco, a pesar de tener algunas canciones buenas, fue decepcionante. En 2002 fue cuando volvieron por sus fueros y sacaron el que de momento ha sido su último mejor disco porque lo que han sacado después (a pesar de ser bueno) no ha superado a este disco.

Mi amigo fue el primero en tener este disco original. Recuerdo que en semana santa alquilamos varios amigos una casa en Conil, una casa en la que a partir del segundo día ya no se podía entrar en la cocina (porque estaba tan sucia que daba miedo y porque se atascó la puerta). Mi otro mejor amigo (mi otro hermano) se tuvo que meter por la ventana del baño (minúscula) para poder entrar en la cocina y abrir desde dentro. Esa semana santa mi amigo llevó el CD de Extremoduro e hizo lo que todos hacemos con nuestro grupo preferido cuando publica un disco nuevo, escucharlo una y otra vez. Ese disco fue la banda sonora de esa semana santa y es imposible que alguno de los que estuvimos allí escuchemos el disco sin acordarnos de esa casa. El disco que estuvo sonando el 90 por ciento del tiempo esa semana fue el de Extremoduro, por méritos propios y porque era el grupo que nos gustaba a todos (y al que no le gustara le terminaría gustando). Posteriormente mi amigo me grabó el CD y lo puse tantas veces y lo llevé a tantos sitios que tuve que grabarmelo otra vez (esta vez ya bajado de internet) porque estaba literalmente rayado de tanto escucharlo.

Yo la primera vez que escuché este disco no me fiaba mucho de él  y tenía algún prejuicio porque creía que podía caer en los mismos errores que "Canciones prohibidas". En unas primeras dos o tres escuchas sólo me gustaron "A fuego" y "Puta", eso sí, me gustaron muchísimo. Poco a poco en esa semana santa y en días posteriores fui descubriendo más canciones hasta que se convirtió en un disco imprescindible. "A fuego" suena brutal rozando el heavy en algunos momentos. "La vereda de la puerta de atrás" ya se ha convertido en un clásico y suena genial. Eso de enterrarse con la picha por fuera para que se la coma un ratón se lo he escuchado a algún amigo que no es ni siquiera fan. "Hoy te la meto" suena bien y además es un ejemplo perfecto de como sólo Extremoduro puede juntar en un mismo disco rock, poesía y algún que otro borderío que mantenga alejado a cualquier persona que no esté realmente interesada en el grupo. Si hablamos de poesía tenemos que hablar de "Standby" (el tercer super hit del disco) y de "Puta" (una canción que comienza con un riff parecido a "two minutes to midnight" de Maiden y que utiliza versos de García Lorca). "Menamoro" sigue en la línea más Extremoduro de antes (en cuanto a letra sobretodo). "Luce la oscuridad" es otra canción que utiliza la provocación como arma. El sonido de la guitarra de Iñaki es espectacular, me atrevería a decir que es uno de los mejores sonidos de guitarra que se habían hecho hasta ese momento en España. Extremoduro siempre tuvo la habilidad de representar de una manera genial la sensación, que se tiene sobre todo cuando se tiene esa edad, de que eres único y diferente a todo lo que pueda existir (para lo bueno y para lo malo). "Cerca del suelo" es más tranquilita y más "Fitipaldis".  "Buitre no come alpiste" suena brutal y cañera como ella sola y además el título ejemplifica perfectamente la filosofía del grupo. Hay que reconcerlo, Roberto Iniesta es un genio que ha sabido encontrar la poesía allí donde nadie mira, allí donde la gente normal pasa de largo y además ha sabido llevarla a su máximo exponente.
Para terminar el disco tenemos "La vieja" canción más cómica que otra cosa que recuerda a aquella de "Me estoy quitando" del "Agila". El grupo ha calificado varias veces su música como "Rock transgresivo". Yo le añadiría que es transgresivo pero también poético y transcendental pues es capaz de hacer poesía con la vida real, con la sub-real incluso. Roberto Iniesta es capaz de darle un sentido mágico a cosas que la mayoría de la gente desprecia. No hay que olvidar que este grupo comenzó siendo un grupo para gente que no cumplía con ninguna convención social aunque ahora lo escuche cualquier hijo de vecino. Este disco llegó a anunciarse en televisión (aunque parezca mentira) como el peor disco del peor grupo porque Roberto Iniesta estaba ya hasta los huevos de escuchar que todos los discos que salían se anunciaban como los mejores cuando en realidad eran basura. Este albúm sirvió de contrapunto (y vaya contrapunto) al primer Operación Triunfo que se hizo en España pues salieron más o menos por la misma fecha.

Nunca me he reido más ni nunca he saltado más que en el concierto de Extremoduro de esa gira en Sevilla. Es un disco y un grupo que para mi representa un hermanamiento con mis dos mejores amigos. Por ahí dicen que los amigos son la familia que uno elige.
Ese concierto fue el último al que fuimos juntos y la verdad es que fue increible e inolvidable en todos los sentidos que se pueda imaginar.
En definitiva un disco que nunca pararé de escuchar, por eso está en esta lista y por eso se lo recomiendo a todo aquel que tenga la bendita suerte de poder escucharlo ahora por primera vez.